La diseñadora catalana vuelve a apostar por el uso del color negro; en algunos casos en los accesorios y en otros imponiendose al clásico blanco, además sorprendió a todos cuando presentó en la pasarela dos trajes idénticos, uno en negro y otro en blanco.
Rosa Clará presentó dos grandes líneas: una inspirada en el Art Nouveau de los principios del siglo XX donde destacan los vestidos joya con pedrería espectaculares y faldas de gran volumen. Y por otro lado trajes de corte sencillo realizados en tejidos extremadamente ligeros como el voile de seda natural.
Los encajes, el corsé, el tul, la gasa, los escotes palabra de honor, faldas enormes con múltiples capas,pedreria, fueron los pilares de ésta colección.
Otra sorpresa fue la presencia en la pasarela de la actriz Mischa Barton, invitada especial que cerró el desfile luciendo un espectacular vestido con escote palabra de honor y una voluminosa falda con infinitas capas de pañuelos de gasa.
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